Los que nos dedicamos al Social Media dedicamos una parte importante de nuestro tiempo a investigar y, por lo tanto, a leer mucho acerca de lo que sucede en nuestro país y otras partes del mundo, sobretodo en Estados Unidos.
Estamos al día de las innovaciones a nivel global, sabemos lo que se cuece en la otra parte del mundo, incluso diseñamos estrategias que llevarían a las empresas al estrellato, refiriéndome con esta palabra a una acción que situaría a la empresa como referente nacional en este campo todavía tan desconocido, incluso para quienes han decidido introducir en el seno de su empresa a un profesional del social media. Pero, ¿qué es lo que nos sucede a la mayoría en la práctica? Pues que las marcas no se atreven a innovar. Las empresas están inmersas en el éxito del pasado, y quieren repetir el mismo éxito, pero no probar algo nuevo.
Tenemos delante varios retos, y a la vez varias dificultades. El gran reto es hacer ver a las empresas que hay que dar pasos hacia delante y dirigidos hacia la innovación, y la gran dificultad es el arraigo al pasado.
Pero en mi manera de ver las cosas, creo que la cuestión está en ver cuál es la combinación que se ajusta a cada modelo de empresa, y a sus necesidades reales de abrirse al exterior, acompañado de una fuerte labor de evangelización que incluye formación departamental con el objetivo de que sean conscientes de que nuestro trabajo toca cada uno de los departamentos, y hay mucho que desarrollar a nivel interno, incluso más que a nivel externo.
La empresa que primero se de cuenta de este factor, será la primera en realmente aplicar en su seno la innovación propiamente dicha, con lo que se irá atreviendo conforme vea resultados.
Lo dicho, nos queda mucho por hacer.
